Te gustaría seguir creyendo que tus sabanas son una fortaleza, pero haz crecido lo suficiente para sentirte insegura en tu propia piel. Quisieras regresar el tiempo y así no tener tantas cicatrices, no temerle tanto a las alturas (o a caer), no pensar tan alto y gritar más fuerte...
A veces no sé porque no haces las cosas que quieres hacer y podrías. ¡Sube una resbaladilla por el lado contrario y desafía la gravedad en los columpios! ¡Come todos los dulces que puedas y brinca en tu cama toda la noche! ¡Corre en la lluvia y brinca en cada charco que se cruce en tu camino! ¡Grita tu canción favorita hasta quedarte sin voz! ¡Cántate las mañanitas a la 1:04 de la madrugada y date un abrazo! ¡Llora con tu película favorita y admite que preferías un final feliz! ¡Deshazte ese nudo en la garganta y regálate un espejo más sincero!
Que sí, que entiendo tu miedo a volar y tu necesidad de caer; que no creas en el amor y un poco más en el dolor; que a veces necesites sangrar para poder seguir riendo... Entiendo que encuentres en la autodestrucción un poco más de paz que en la felicidad. Pero a ti lo que te pasa no es que te haz vuelto loca, sino que quieres cortarte las alas por miedo a que te las aten; que te rompes el corazón por pasatiempo porque no quieres que nadie venga a rompértelo y que te deje solo fragmentos de un rompecabezas que no encaja; que te cortas el pelo porque no te atreves a hacerlo con la cabeza; que te saboteas la felicidad por miedo a la temporalidad y al abandono...
Ya sé que te aterran las sonrisas sinceras y los "te quiero" inesperados porque te recuerdan que aun tienes un corazón que se rompe y sangra. Entiendo porque corres siempre en la dirección opuesta cuando te quieren imponer futuro y es que el pasado te pesa demasiado y el presente te está mordiendo los tobillos y sólo te hace tropezar. Pero por una vez en tu vida deberías reír hasta quedarte sin aliento y abrazar hasta que te duela el corazón de alegría.
Te haz roto el corazón tantas veces que ya los bordes de cada pieza están desgastados, ¿por qué no intentas construir otra figura? Tal vez si tuvieras un tiburón blanco por corazón no tendrías tanto miedo de tocar fondo.
Lo que a ti te pasa es que no sabes cuidar de ti y no quieres que alguien mas lo haga porque ¿quién va a saber completar el argumento y hacer que todos tus instintos suicidas decidan colgarse? Te haz dado demasiados golpes de culpa que el amor ya se empieza a sentir como escribir una nota suicida.
Tú no sabes estar bien porque siempre encuentras la forma de estar al borde de querer morir y derramas el vaso para no ahogarte pero terminas llenándote de tanto vacío. Tú no sabes estar alto si no es para saltar y ríes sólo para terminar llorando detrás de las puertas.
Deberías dejar de sabotear tus sonrisas y esconder el miedo debajo del colchón; tomar el camino largo a casa, corretear entre los rayos del sol. Yo qué sé... empezar a ser tú, así, sin titubeos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario