Creo que ya era hora de sacármelo del pecho,
que después de todo, todo mundo lo sabia,
pero mi mundo jamas se dio cuenta.
Aquí te cuento unas cuantas cosas
que debí contarte cuando estabas aquí
pero que no me atreví,
por aquello de las despedidas.
Tienes que saber
que a mi nunca me importaron los horarios
que los calendarios no estaban en mi vocabulario
pero los días de la semana,
esos si que me tenían bien agarrada,
pero aun así logre zafarme del Domingo,
para estar contigo...
Si supieras que toco mejor la guitarra de lo que aparento,
que lo que pasa es que me ganan las vergüenzas
y las segundas versiones de un encuentro,
tal vez te hubieras puesto a componer conmigo
y no terminaría con una libreta de letras sin melodías.
Si supieras que cuando hablaba de mi pasado
era porque necesitaba que me dijeras que tu serias mi futuro,
y hasta puedo jurar que a veces tu también lo pensaste,
pero me quede perdida en la traducción.
Si supieras que a mi las promesas me asquean,
pero creo que en el fondo lo sabes,
porque nunca me haz prometido nada.
Si supieras que la versión de mi,
antes de conocerte,
siempre fue la peor,
nunca fui yo.
De algún modo me gustaba estar contigo,
me sentía mas mía,
mas fuerte,
mas visible,
mas simpática.
Cuando estaba contigo
me convertía en marea,
me hacia luna,
me pintaba de supernova,
me disfrazaba de poeta,
y me enredaba los atardeceres al cabello.
Llegue a pensar en que perfume usar,
¿Te lo puedes creer?
Llegue a hablar de enamorarse,
de las historias sin finales (que yo antes tanto odiaba)
de los puntos suspensivos después de una despedida
y reviví cada momento de mi infancia
y reescribí cada momento de mi adolescencia,
y así fue como fui la mejor versión.
Y pensaran que esto ya no tiene sentido,
pero para mi siempre sera buen momento,
si se trata de hablarles de ti a las paredes.
viernes, 31 de enero de 2014
jueves, 30 de enero de 2014
El fantasma del espejo.
¿Quién podría no darse cuenta? Y aun así nadie lo nota.
¿Cómo puede existir un infierno tan grande y ser invisible para todos? Pero es que yo tengo este talento de cortarme las venas y seguir sonriendo.
He soltado carcajadas cuando me ha faltado la voz, he corrido cuando no puedo respirar, he escalado una montaña cuando tenía las piernas rotas y un hueco en el pecho.
¿Qué no podré hacer yo, que hecho hasta lo imposible por morir?
Vivir...
No puedo vivir sin este terror constante en la mirada y esta culpa que me hace caer de vez en cuando.
No puedo vivir teniendo que mirarla a los ojos todas las mañanas y tener que decirle con el corazón en la navaja "te he defraudado".
Ella me mira con repulsión. Ella me odia. Me odio.
Si los demás supieran que cada vistazo al espejo es una batalla mas dura por no matarme.
Si ellos vieran lo que yo veo...
Si ellos vieran la chica destrozada que me mira con desdén, la chica con incontables cicatrices en el cuerpo. Si ellos me vieran desde mis ojos se aterrarían.
Desde mis ojos ya no hay una chica, sino lo que queda de ella. Desde donde yo la observo es un monstruo.
La gorda anoréxica, la bulimica asquerosa, la inútil suicida...
Ellos no saben de las veces que me cosí la boca para no probar aquel pastel, de las veces que me pesaba la existencia en la columna y que ni siquiera podía conseguir que mis piernas me sostuvieran sin temblar.
Ellos no saben del ardor en mi garganta, de sangre que advertía que algo definitivamente andaba mal dentro de mi.
Ellos nunca entenderán la razón de mi sonrisa al sentir el frío quemar mi piel y hacerme temblar sin control, jamas sabrán lo que costo dejar atrás las cadenas de ser mujer para convertirme en un monstruo de encías sangrantes y piel translucida.
Ellos que saben de la vida bajo mi piel si jamas vieron la sangre correr por mis brazos, si nunca se imaginaron lo de las cuchillas debajo del colchón.
¿Cómo se atrevieron a decir que era una niña superficial? Que a mi de niña ya no me quedaba nada y de superficial ya ni siquiera me sentaba.
¿Cómo puede ser superficial querer morir, querer destrozarme a toda costa? Que en la muerte no hay esa belleza mundana a la que todos aspiran, si hubiera querido ser bella solo hubiera bastado correr en las mañanas y dejar los dulces. Pero yo ya no quería nada de eso, quería que nadie me mirara y ya ni siquiera me importaba el tono de mis labios, o que mis mejillas estuvieran lo suficientemente rosadas.
¿Quien se iba a fijar en una chica mutilada y de piel pálida y seca? ¿Quien iba a querer a la chica a la que se le caía el cabello, o a la chica que ya no podía correr sin correr el riesgo de caer al suelo?
A mi eso de la belleza ya no me fijaba, y eso de la belleza interior siempre me pareció una basura elitista. Eso de la belleza interior fue dicho por los dichosos elegidos de Afrodita para hacer sentir un poco mejor a los demás en la línea, pero eso no quiere decir que sea cierto.
Me queda de puta madre eso de la belleza interna porque entonces ya se por qué soy como el espejo me muestra, porque soy este monstruo mutilado que se mata de hambre.
Y después vinieron las pastillas que jamas hicieron que los terrores desaparecieran por las noches, no voy a negar que me hacían dormir mas de cuatro horas, pero jamas me salvaron en lo absoluto.
Después de las recetas medicas y las visitas al psiquiatra seguía siendo la misma loca que no podía verse como los demás le veía, la misma chica absurda que no encontraba un sentido en toda esta mierda. Pero ahora era un loca medicada y eso implicaba que tenia que sonreír mas y hablar menos de mis ganas de morir, porque uno de be saber que cuando estas con los psicóticos en la mano y dices que planeas suicidarte te mandan al psiquiátrico y yo ya estaba a dos pasos.
Y tuve que seguir sonriendo hasta que termine vomitando una realidad que no era mía, que nunca lo fue y definitivamente nunca lo seria. Termine hablando con las paredes de la muerte y de mis últimos respiros. Pero yo ya estaba tan jodida como mi propio estomago.
No creo que nadie hubiera sabido de las ganas que yo tenia de saltar de aquel edificio donde veía a mi psicóloga, nunca se hubieran imaginado pues les decía con una sonrisa "estoy bien" mientras me apuñalaba yo misma en la espalda y jugaba a no sentir nada en absoluto, aunque hubo un punto en el que ya no sentí nada.
Y he aprendido a maquillarme los sentimientos por miedo a que me quiten la libertad de estar libre de drogas, aunque esas ya parecen que se crean solas en mi cerebro pues me hacen alucinar de vez en cuando.
Desvió la mirada del espejo, con todos los fantasmas que me gritan para seguir alimentándose de mi, pero yo no volteo ni una sola vez, "mañana tendremos mas tiempo" les digo calando la sonrisa del día de hoy.
¿Cómo puede existir un infierno tan grande y ser invisible para todos? Pero es que yo tengo este talento de cortarme las venas y seguir sonriendo.
He soltado carcajadas cuando me ha faltado la voz, he corrido cuando no puedo respirar, he escalado una montaña cuando tenía las piernas rotas y un hueco en el pecho.
¿Qué no podré hacer yo, que hecho hasta lo imposible por morir?
Vivir...
No puedo vivir sin este terror constante en la mirada y esta culpa que me hace caer de vez en cuando.
No puedo vivir teniendo que mirarla a los ojos todas las mañanas y tener que decirle con el corazón en la navaja "te he defraudado".
Ella me mira con repulsión. Ella me odia. Me odio.
Si los demás supieran que cada vistazo al espejo es una batalla mas dura por no matarme.
Si ellos vieran lo que yo veo...
Si ellos vieran la chica destrozada que me mira con desdén, la chica con incontables cicatrices en el cuerpo. Si ellos me vieran desde mis ojos se aterrarían.
Desde mis ojos ya no hay una chica, sino lo que queda de ella. Desde donde yo la observo es un monstruo.
La gorda anoréxica, la bulimica asquerosa, la inútil suicida...
Ellos no saben de las veces que me cosí la boca para no probar aquel pastel, de las veces que me pesaba la existencia en la columna y que ni siquiera podía conseguir que mis piernas me sostuvieran sin temblar.
Ellos no saben del ardor en mi garganta, de sangre que advertía que algo definitivamente andaba mal dentro de mi.
Ellos nunca entenderán la razón de mi sonrisa al sentir el frío quemar mi piel y hacerme temblar sin control, jamas sabrán lo que costo dejar atrás las cadenas de ser mujer para convertirme en un monstruo de encías sangrantes y piel translucida.
Ellos que saben de la vida bajo mi piel si jamas vieron la sangre correr por mis brazos, si nunca se imaginaron lo de las cuchillas debajo del colchón.
¿Cómo se atrevieron a decir que era una niña superficial? Que a mi de niña ya no me quedaba nada y de superficial ya ni siquiera me sentaba.
¿Cómo puede ser superficial querer morir, querer destrozarme a toda costa? Que en la muerte no hay esa belleza mundana a la que todos aspiran, si hubiera querido ser bella solo hubiera bastado correr en las mañanas y dejar los dulces. Pero yo ya no quería nada de eso, quería que nadie me mirara y ya ni siquiera me importaba el tono de mis labios, o que mis mejillas estuvieran lo suficientemente rosadas.
¿Quien se iba a fijar en una chica mutilada y de piel pálida y seca? ¿Quien iba a querer a la chica a la que se le caía el cabello, o a la chica que ya no podía correr sin correr el riesgo de caer al suelo?
A mi eso de la belleza ya no me fijaba, y eso de la belleza interior siempre me pareció una basura elitista. Eso de la belleza interior fue dicho por los dichosos elegidos de Afrodita para hacer sentir un poco mejor a los demás en la línea, pero eso no quiere decir que sea cierto.
Me queda de puta madre eso de la belleza interna porque entonces ya se por qué soy como el espejo me muestra, porque soy este monstruo mutilado que se mata de hambre.
Y después vinieron las pastillas que jamas hicieron que los terrores desaparecieran por las noches, no voy a negar que me hacían dormir mas de cuatro horas, pero jamas me salvaron en lo absoluto.
Después de las recetas medicas y las visitas al psiquiatra seguía siendo la misma loca que no podía verse como los demás le veía, la misma chica absurda que no encontraba un sentido en toda esta mierda. Pero ahora era un loca medicada y eso implicaba que tenia que sonreír mas y hablar menos de mis ganas de morir, porque uno de be saber que cuando estas con los psicóticos en la mano y dices que planeas suicidarte te mandan al psiquiátrico y yo ya estaba a dos pasos.
Y tuve que seguir sonriendo hasta que termine vomitando una realidad que no era mía, que nunca lo fue y definitivamente nunca lo seria. Termine hablando con las paredes de la muerte y de mis últimos respiros. Pero yo ya estaba tan jodida como mi propio estomago.
No creo que nadie hubiera sabido de las ganas que yo tenia de saltar de aquel edificio donde veía a mi psicóloga, nunca se hubieran imaginado pues les decía con una sonrisa "estoy bien" mientras me apuñalaba yo misma en la espalda y jugaba a no sentir nada en absoluto, aunque hubo un punto en el que ya no sentí nada.
Y he aprendido a maquillarme los sentimientos por miedo a que me quiten la libertad de estar libre de drogas, aunque esas ya parecen que se crean solas en mi cerebro pues me hacen alucinar de vez en cuando.
Desvió la mirada del espejo, con todos los fantasmas que me gritan para seguir alimentándose de mi, pero yo no volteo ni una sola vez, "mañana tendremos mas tiempo" les digo calando la sonrisa del día de hoy.
miércoles, 29 de enero de 2014
Carta de regreso.
Se que prometí ya no escribirte
pero debo confesarte que cruce los dedos.
Se que es tarde para hablarte
pero cuando quieras puedes cerrar la puerta.
Si aun no la has cerrado
y aun así me das un minuto
o tres, porque no se cuantos me ocupe,
entonces déjame decirte
que no he conseguido el mejor libro
que me parece que si la mejor historia.
Sigo atrapada en Benedetti desde el año pasado
con su segundo inventario
y yo ya llevo el cuarto cuando hablo de ti,
y bueno solo te quería decir que he recordado,
que te he recordado.
Este regreso no era obligatorio
sin embargo
mi abrazo no ha encontrado su brazo,
ni su cuello,
ni el lugar donde terminar,
como siempre,
con un beso en la mejilla.
Pero tampoco mi mejilla ha encontrado beso.
Si te soy sincera nada tiene un lugar
desde que tu te fuiste.
¡Ya! ¡No digas nada!
Esta bien... yo me fui.
Pero tengo una buena razón,
tu te ibas a ir de todos modos,
con todos mis modos,
y manías,
y costumbres raras,
y yo sin ellas
¿que se suponía que iba a hacer?
Ya lo entiendo, es mi culpa
esperaba que me perdonaras.
Pero no vine a pedirte perdón,
y te asombrara mi petición.
He venido a decirte
que ya es hora que te vayas del todo
que te lleves todas tus cosas,
todas tus costumbres
y tus canciones favoritas,
y tus palabras extrañas,
porque ahora me están estorbando.
Tu cafetera no me deja tomar el te de la mañana,
tus cuerdas no me dejan afinar mi corazón,
tus complicación me arrastran los pies,
tu perfume me esta causando alergia,
pero lo que es mas urgente,
lo que quiero que lo saques
y a ver a donde te lo quieren
o donde le hacen un gran espacio
(porque te advierto que no cabe en tu auto)
es esto que me esta rompiendo las costillas
y que me hace puré el pulmón izquierdo
y que me esta dejando sin vacantes en el corazón.
Solo te advierto que le debes cuidar bien,
porque es un poco terco este sentimiento,
tiene una gran demanda de atención.
En verdad me disculpo por dejártelo en el buzón,
no me vengas a preguntar que cómo le he hecho
que yo ya aprendí varios trucos de magia.
Te resumo la historia:
le tuve que convencer con algo de mi sangre
y me vio llorar
y me vio romperme,
le tuve que decir que tu le cuidarías mejor,
y en verdad espero que lo hagas.
Cualquier duda,
no me vengas a preguntar,
que yo no sabría decirte.
Solo dale un té por la tarde
y cobija en el invierno
y no le dejes crecer en la primavera
que ya no sabrás donde ponerle.
Encuentra alguien que te diga que hacer con el,
y pagale con los besos que eran míos por derecho,
dale un abrazo de aquellos que solo se nos daban en las noches
y cántale nuestra canción,
con ella siempre empiezan los bueno días
y con ella también se escriben las mejores historias.
Y aquí esta,
te veré cuando vengas por el resto de las palabras.
pero debo confesarte que cruce los dedos.
Se que es tarde para hablarte
pero cuando quieras puedes cerrar la puerta.
Si aun no la has cerrado
y aun así me das un minuto
o tres, porque no se cuantos me ocupe,
entonces déjame decirte
que no he conseguido el mejor libro
que me parece que si la mejor historia.
Sigo atrapada en Benedetti desde el año pasado
con su segundo inventario
y yo ya llevo el cuarto cuando hablo de ti,
y bueno solo te quería decir que he recordado,
que te he recordado.
Este regreso no era obligatorio
sin embargo
mi abrazo no ha encontrado su brazo,
ni su cuello,
ni el lugar donde terminar,
como siempre,
con un beso en la mejilla.
Pero tampoco mi mejilla ha encontrado beso.
Si te soy sincera nada tiene un lugar
desde que tu te fuiste.
¡Ya! ¡No digas nada!
Esta bien... yo me fui.
Pero tengo una buena razón,
tu te ibas a ir de todos modos,
con todos mis modos,
y manías,
y costumbres raras,
y yo sin ellas
¿que se suponía que iba a hacer?
Ya lo entiendo, es mi culpa
esperaba que me perdonaras.
Pero no vine a pedirte perdón,
y te asombrara mi petición.
He venido a decirte
que ya es hora que te vayas del todo
que te lleves todas tus cosas,
todas tus costumbres
y tus canciones favoritas,
y tus palabras extrañas,
porque ahora me están estorbando.
Tu cafetera no me deja tomar el te de la mañana,
tus cuerdas no me dejan afinar mi corazón,
tus complicación me arrastran los pies,
tu perfume me esta causando alergia,
pero lo que es mas urgente,
lo que quiero que lo saques
y a ver a donde te lo quieren
o donde le hacen un gran espacio
(porque te advierto que no cabe en tu auto)
es esto que me esta rompiendo las costillas
y que me hace puré el pulmón izquierdo
y que me esta dejando sin vacantes en el corazón.
Solo te advierto que le debes cuidar bien,
porque es un poco terco este sentimiento,
tiene una gran demanda de atención.
En verdad me disculpo por dejártelo en el buzón,
no me vengas a preguntar que cómo le he hecho
que yo ya aprendí varios trucos de magia.
Te resumo la historia:
le tuve que convencer con algo de mi sangre
y me vio llorar
y me vio romperme,
le tuve que decir que tu le cuidarías mejor,
y en verdad espero que lo hagas.
Cualquier duda,
no me vengas a preguntar,
que yo no sabría decirte.
Solo dale un té por la tarde
y cobija en el invierno
y no le dejes crecer en la primavera
que ya no sabrás donde ponerle.
Encuentra alguien que te diga que hacer con el,
y pagale con los besos que eran míos por derecho,
dale un abrazo de aquellos que solo se nos daban en las noches
y cántale nuestra canción,
con ella siempre empiezan los bueno días
y con ella también se escriben las mejores historias.
Y aquí esta,
te veré cuando vengas por el resto de las palabras.
martes, 28 de enero de 2014
Debes saber algunas cosas.
Antes de conocerme debes saber algunas cosas:
Nunca aprendí a ser yo cuando tocaba el piano y nunca fui demasiado apasionada, según los maestros. La verdad, es que a mi me aterra dejar ver lo que siento.
No me gusta despertar temprano, pero a veces lo hago y ya no puedo volver a dormir.
Nunca me han gustado las segundas partes y tal vez es por ello lo de escapar antes de terminar.
Los domingos soy un poco mas extraña y nunca salgo por aquello de la presión del lunes, pero contigo haría una excepción al mes.
No me gusta conducir cuando hay alguien mas conmigo que también sabe hacerlo, puede que pienses que soy paranoica pero creo que criticaran mi manía de detenerme en los amarillos por la noche. Pero es que yo hago tiempo para no llegar a casa.
Tengo un par de libros que he intentado leer pero siempre me quedo a medias.
Guardo la carta de un viejo amor en el bolso, por si un día le encuentro y me dan ganas de vomitar las esperanzas caducadas. Se la devolveré.
Siempre he querido tener un gato, pero me he dado cuenta que soy alérgica a ellos. Aun así me detengo de vez en cuando a repartir caricias baratas a gatos callejeros.
Tengo 71 listas de canciones que tal ve nunca descargue, pero las tengo guardadas por si acaso.
Tengo un libro de cocina junto a mis discos, por si un día vivo sola, aunque se que nunca le abriré y terminare tomando algo de la nevera.
Tengo un tatuaje en la nuca que cambia de significado conforme la estación. Y hablando de estaciones nunca supe bien cuando terminaba una y empezaba la otra.
No canto muy bien el rock, pero me gusta hacerlo cuando estoy sola, aunque en realidad soy mas del country y del soul.
Solo he pagado por dos conciertos en mi vida y ha sido la misma banda.
Siempre he querido visitar Thailandia y aprender a tomar fotos de noche.
Debo confesar que para mi ningún dibujo que he hecho ha quedado bien, pero me he rendido en ellos por mi propio bien.
El te chai es mi favorito, pero siempre pediré un te verde, por aquello de la costumbre. Pero si hago una excepción contigo es que estoy disfrutando de tu compañía.
Las películas románticas nunca han sido mi fuerte, hacen que mis mejillas se vuelvan del color de mi cabello y que sienta una extraña presión en el estomago. Y eso me da vértigo.
Lo mas parecido a un diario que he tenido ha sido un poemario.
Nunca nadie me ha preguntado sobre mi día de la semana favorito, pero si tienes suerte te diría que es el Miércoles.
No soy de las personas de café negro por la mañana, yo lo prefiero los jueves por la tarde para sobrevivir al fin de semana.
Me he inventado una que otra alergia para evitar los alimentos que odio.
Los sábados solo tengo una pocas horas de vida, pero eso me basta para sobrellevar la tarde.
Siempre he querido convertir mi cuarto en un estudio, pero para eso me sobran muebles.
Vomitar me da sueño y dolor de cabeza por la mañana, pero es la mejor forma de huirle al insomnio.
Guardo 5 versiones de la misma historia en mis notas y empiezo a creer que debería dejarlas ir.
Tengo una maleta de costumbres autodestructivas, pero nunca aprendí a vivir sin ella. No me culpes, lo he estado intentado.
No creo poder advertirte lo suficiente, pero creo que he hecho bien en decirte que lo pienses dos veces antes de sonreírme, porque yo tengo un corazón que se adhiere fácilmente y que se sincroniza mas rápido de lo que yo quisiera.
Sobre aviso no hay engaño, no se aceptan devoluciones, pues mi corazón ya ha sido timado y saboteado.
Y ya esta, la decisión es tuya.
Pero por cualquier decisión que hayas tomado, yo me atare mi estrella al hombro, esta vez no quiero que me deje solo la noche.
Nunca aprendí a ser yo cuando tocaba el piano y nunca fui demasiado apasionada, según los maestros. La verdad, es que a mi me aterra dejar ver lo que siento.
No me gusta despertar temprano, pero a veces lo hago y ya no puedo volver a dormir.
Nunca me han gustado las segundas partes y tal vez es por ello lo de escapar antes de terminar.
Los domingos soy un poco mas extraña y nunca salgo por aquello de la presión del lunes, pero contigo haría una excepción al mes.
No me gusta conducir cuando hay alguien mas conmigo que también sabe hacerlo, puede que pienses que soy paranoica pero creo que criticaran mi manía de detenerme en los amarillos por la noche. Pero es que yo hago tiempo para no llegar a casa.
Tengo un par de libros que he intentado leer pero siempre me quedo a medias.
Guardo la carta de un viejo amor en el bolso, por si un día le encuentro y me dan ganas de vomitar las esperanzas caducadas. Se la devolveré.
Siempre he querido tener un gato, pero me he dado cuenta que soy alérgica a ellos. Aun así me detengo de vez en cuando a repartir caricias baratas a gatos callejeros.
Tengo 71 listas de canciones que tal ve nunca descargue, pero las tengo guardadas por si acaso.
Tengo un libro de cocina junto a mis discos, por si un día vivo sola, aunque se que nunca le abriré y terminare tomando algo de la nevera.
Tengo un tatuaje en la nuca que cambia de significado conforme la estación. Y hablando de estaciones nunca supe bien cuando terminaba una y empezaba la otra.
No canto muy bien el rock, pero me gusta hacerlo cuando estoy sola, aunque en realidad soy mas del country y del soul.
Solo he pagado por dos conciertos en mi vida y ha sido la misma banda.
Siempre he querido visitar Thailandia y aprender a tomar fotos de noche.
Debo confesar que para mi ningún dibujo que he hecho ha quedado bien, pero me he rendido en ellos por mi propio bien.
El te chai es mi favorito, pero siempre pediré un te verde, por aquello de la costumbre. Pero si hago una excepción contigo es que estoy disfrutando de tu compañía.
Las películas románticas nunca han sido mi fuerte, hacen que mis mejillas se vuelvan del color de mi cabello y que sienta una extraña presión en el estomago. Y eso me da vértigo.
Lo mas parecido a un diario que he tenido ha sido un poemario.
Nunca nadie me ha preguntado sobre mi día de la semana favorito, pero si tienes suerte te diría que es el Miércoles.
No soy de las personas de café negro por la mañana, yo lo prefiero los jueves por la tarde para sobrevivir al fin de semana.
Me he inventado una que otra alergia para evitar los alimentos que odio.
Los sábados solo tengo una pocas horas de vida, pero eso me basta para sobrellevar la tarde.
Siempre he querido convertir mi cuarto en un estudio, pero para eso me sobran muebles.
Vomitar me da sueño y dolor de cabeza por la mañana, pero es la mejor forma de huirle al insomnio.
Guardo 5 versiones de la misma historia en mis notas y empiezo a creer que debería dejarlas ir.
Tengo una maleta de costumbres autodestructivas, pero nunca aprendí a vivir sin ella. No me culpes, lo he estado intentado.
No creo poder advertirte lo suficiente, pero creo que he hecho bien en decirte que lo pienses dos veces antes de sonreírme, porque yo tengo un corazón que se adhiere fácilmente y que se sincroniza mas rápido de lo que yo quisiera.
Sobre aviso no hay engaño, no se aceptan devoluciones, pues mi corazón ya ha sido timado y saboteado.
Y ya esta, la decisión es tuya.
Pero por cualquier decisión que hayas tomado, yo me atare mi estrella al hombro, esta vez no quiero que me deje solo la noche.
lunes, 27 de enero de 2014
Carencias.
Cuando creí que mi costumbre de buscarme completa había terminado apareció el con un puto motivo para hacerme pensar que la primavera no era mía por nacimiento.
Halló la manera de tentarme a hacer casting en su piel con la única razón de verme envuelta de un pecho mas amplio que el mio.
Yo no sabia su nombre pero el ya se sabia mis debilidades de memoria y conocía mis inquietudes como su película favorita, pero yo no sabia su nombre, eso no olvides.
Me dijo con una media sonrisa tu apellido, que encajaba perfecto con el mio, como si el no supieras que me iba enamorar de el.
Pedí perdón a los cuatro vientos por querer emprender de nuevo mi búsqueda, porque ya sabes que esa clase de cosas siempre terminan por arracancarme alguna pieza necesaria. Pero yo estaba dispuesta a pasar por las carencias, de nuevo, sin protestar.
Mis días se convirtieron en mañanas sin hablarle y tardes de amarle, o de jugar a que me no me gustaba cada estúpido detalle de su andar.
Antes de amanecer me podías encontrar cepillando mi cabello, ¿te lo puedes creer?
Y antes de que yo me diera cuenta me encontré resulta en los brazos de un cuerpo ajeno al mio, me encontré poeta en unos ojos marrones que me hacían temblar.
Antes de lo pude prever fui una naufraga en una boca que no era la mía pero que encaja perfecta en la mía, como el mas secreto rompecabezas, porque así eramos, secreto.
Fui cromática. Fui la virgen y la prostituta, fui el arma y la flor, fui la luna y el sol, el hielo y el fuego, la noche y la mañana. Fui yo, por primera vez, fui yo.
Y fui una gilipollas con la mitad del corazón en guerra y la otra mitad en jardín de amapolas.
Y me enamore del chico sin rosas, aunque tampoco las esperaba, del chico de las palabras extrañas y coincidencias mas como "destino".
Una tarde cualquiera me mire al espejo y por primera vez me gusto lo que vi, y supe que era su obra. Que eso que veía frente a mi era la primavera creciendo en el invierno, y eso fui con el.
Halló la manera de tentarme a hacer casting en su piel con la única razón de verme envuelta de un pecho mas amplio que el mio.
Yo no sabia su nombre pero el ya se sabia mis debilidades de memoria y conocía mis inquietudes como su película favorita, pero yo no sabia su nombre, eso no olvides.
Me dijo con una media sonrisa tu apellido, que encajaba perfecto con el mio, como si el no supieras que me iba enamorar de el.
Pedí perdón a los cuatro vientos por querer emprender de nuevo mi búsqueda, porque ya sabes que esa clase de cosas siempre terminan por arracancarme alguna pieza necesaria. Pero yo estaba dispuesta a pasar por las carencias, de nuevo, sin protestar.
Mis días se convirtieron en mañanas sin hablarle y tardes de amarle, o de jugar a que me no me gustaba cada estúpido detalle de su andar.
Antes de amanecer me podías encontrar cepillando mi cabello, ¿te lo puedes creer?
Y antes de que yo me diera cuenta me encontré resulta en los brazos de un cuerpo ajeno al mio, me encontré poeta en unos ojos marrones que me hacían temblar.
Antes de lo pude prever fui una naufraga en una boca que no era la mía pero que encaja perfecta en la mía, como el mas secreto rompecabezas, porque así eramos, secreto.
Fui cromática. Fui la virgen y la prostituta, fui el arma y la flor, fui la luna y el sol, el hielo y el fuego, la noche y la mañana. Fui yo, por primera vez, fui yo.
Y fui una gilipollas con la mitad del corazón en guerra y la otra mitad en jardín de amapolas.
Y me enamore del chico sin rosas, aunque tampoco las esperaba, del chico de las palabras extrañas y coincidencias mas como "destino".
Una tarde cualquiera me mire al espejo y por primera vez me gusto lo que vi, y supe que era su obra. Que eso que veía frente a mi era la primavera creciendo en el invierno, y eso fui con el.
jueves, 23 de enero de 2014
Lo que nunca te dije.
A estas horas me llega la honestidad golpeando el costado y creo que debería decirte una cuantas cosas, creo que debes saber de los insomnios y de los planes que nos tenia y que jamas me atreví a proponerte.
Espero que recuerdes cuando no pude soltarte, me temblaban las manos por hacerte sentir todos las oportunidades que había dejado pasar, quería mostrarte todos los sentimientos que escondía bajo la piel.
¿Recuerdas esa noche de Marzo? Bueno... en realidad no tenia frió, solo eran nervios. Esa noche termine desnudando mi vida para ti, te regale mi pasado y me diste una sonrisa que jamas había visto antes y una historia graciosa que ahora provoca una avalancha en mi estomago. No sabes cuantas cosas mas tenia por decirte, pero ya sabes que el tiempo siempre se nos viene encima.
No se si recuerdas la primera vez que nuestras coincidencias decidieron volverse casualidades y después de eso solo buscábamos la manera de tropezar. Debo confesar que estaba mas nerviosa de lo que mis piernas aparentaban y que cuando te volteaste no pude evitar una sonrisa que hizo que mis mejillas dolieran.
Recuerdo que tu cabello me parecía algo tonto y las manías que tenias al hablar siempre me sacaban de quicio y después añadías ese acento extraño al decir ciertas palabras que jamas había escuchado en otras personas y que en ti sonaban tan correctas. Te podría haber dicho que me encantaba cuando me preguntabas el significado de alguna que no habías escuchado antes, pero ya sabes que a mi se me pasan mucho las cosas que te quiero decir porque me distraen esos ojos marrones tan comunes pero que en ti hacen un efecto diferente, como a poesía.
Y después hablamos de lo bonito de los atardeceres y del mar y las estrellas, de la forma en que la luna se volvía tan bella cuando las nubes le perfilaban, hablamos del ruido de un motor que parecía un ronroneo del gato mas feo y de olores que no sabíamos que eran, de los largos paseos por carretera y del viento en las mejillas y de otras cosas tontas que nadie parece prestarles atención. Pero a ti y ami nos gustaban, tanto como tu soñabas fotografiar el brillo de los ojos mas sinceros y yo lo quería dibujar.
El primer día de mi vida siempre fue algo parecido a tu voz, sentí que nací la mañana que tocaste mi cabello y me sentí ciega hasta que vi el lunar de detrás de tu oreja. Sentía que apenas había despertado la primera vez que te escuche tu voz después de dormir la siesta, porque soñando ya estaba mientras te veía dormir.
Sabes, ahora no me importarían unas cuantas pecas en mis mejillas por compartir el sol contigo, no me vendría mal el calor de tu risa en esta tarde de enero, y agradecería mucho tu mano sosteniendo la mía mientras te leo mi poema favorito.
Nunca te dije que pase de quererte a odiarte, de amarte a aborrecer no poder olvidarte, pase por la ansiedad de tenerte justo enfrente y no poder decirte lo que ya tenia en la punta de la lengua a la desesperación de verte otra vez marchándote como siempre.
Y ahora ya esta, ya lo sabes... y no. Lo que no sabes es que las circunstancias no están a mi favor, ni el día, ni el mes y tal vez la vida tampoco. Pero me basta con que lo sepas.
Espero que recuerdes cuando no pude soltarte, me temblaban las manos por hacerte sentir todos las oportunidades que había dejado pasar, quería mostrarte todos los sentimientos que escondía bajo la piel.
¿Recuerdas esa noche de Marzo? Bueno... en realidad no tenia frió, solo eran nervios. Esa noche termine desnudando mi vida para ti, te regale mi pasado y me diste una sonrisa que jamas había visto antes y una historia graciosa que ahora provoca una avalancha en mi estomago. No sabes cuantas cosas mas tenia por decirte, pero ya sabes que el tiempo siempre se nos viene encima.
No se si recuerdas la primera vez que nuestras coincidencias decidieron volverse casualidades y después de eso solo buscábamos la manera de tropezar. Debo confesar que estaba mas nerviosa de lo que mis piernas aparentaban y que cuando te volteaste no pude evitar una sonrisa que hizo que mis mejillas dolieran.
Recuerdo que tu cabello me parecía algo tonto y las manías que tenias al hablar siempre me sacaban de quicio y después añadías ese acento extraño al decir ciertas palabras que jamas había escuchado en otras personas y que en ti sonaban tan correctas. Te podría haber dicho que me encantaba cuando me preguntabas el significado de alguna que no habías escuchado antes, pero ya sabes que a mi se me pasan mucho las cosas que te quiero decir porque me distraen esos ojos marrones tan comunes pero que en ti hacen un efecto diferente, como a poesía.
Y después hablamos de lo bonito de los atardeceres y del mar y las estrellas, de la forma en que la luna se volvía tan bella cuando las nubes le perfilaban, hablamos del ruido de un motor que parecía un ronroneo del gato mas feo y de olores que no sabíamos que eran, de los largos paseos por carretera y del viento en las mejillas y de otras cosas tontas que nadie parece prestarles atención. Pero a ti y ami nos gustaban, tanto como tu soñabas fotografiar el brillo de los ojos mas sinceros y yo lo quería dibujar.
El primer día de mi vida siempre fue algo parecido a tu voz, sentí que nací la mañana que tocaste mi cabello y me sentí ciega hasta que vi el lunar de detrás de tu oreja. Sentía que apenas había despertado la primera vez que te escuche tu voz después de dormir la siesta, porque soñando ya estaba mientras te veía dormir.
Sabes, ahora no me importarían unas cuantas pecas en mis mejillas por compartir el sol contigo, no me vendría mal el calor de tu risa en esta tarde de enero, y agradecería mucho tu mano sosteniendo la mía mientras te leo mi poema favorito.
Nunca te dije que pase de quererte a odiarte, de amarte a aborrecer no poder olvidarte, pase por la ansiedad de tenerte justo enfrente y no poder decirte lo que ya tenia en la punta de la lengua a la desesperación de verte otra vez marchándote como siempre.
Y ahora ya esta, ya lo sabes... y no. Lo que no sabes es que las circunstancias no están a mi favor, ni el día, ni el mes y tal vez la vida tampoco. Pero me basta con que lo sepas.
miércoles, 15 de enero de 2014
Ya no se quien soy.
Se que es tarde, pero tu sabes que yo nunca me he sincronizado con los relojes. Espero no molestarte, solo quería despedirme de ti... y de mi.
Te tengo que confesar que desde que tu ya no estabas mi sol se fue con tu voz y me dejo algo que parece que es invierno, pero no me da bastante frió.
Creo que ya te conoces esta historia, pero nunca pensé que fuera a llegar a ser tan literal el decir que sin ti ya no soy yo, pero es la verdad. Me gustaría decirte que ya no pienso en ti en lo absoluto, pero te mentiría, aunque no seria la primera vez.
Antes de que te marches del todo con mi todo, te debo decir que te llevas mis mejores poemas en tus ojos y mis mas bonitas canciones en tu pelo, que en general te llevas mi vida y toda mi existencia contigo.
Tengo que decirte que si te cancele a dos horas no era porque tuviera otro compromiso mas importante, pues no hay nada mas importante, pero me paralice aterrada al imaginarme frente a ti y no me creí capaz de no decirte cuanto me gustaba la manera en la que hablabas y movías las manos .
Lamento que todos hayan sabido de las cosas bonitas que sentía y de todas las palabras que te quería decir menos tu, no sabes cuanto me hubiera gustado ser mas valiente y dártelos solamente a ti.
Cuida bien de mis manías y de mis costumbres raras por la mañana y no dejes escapar a mis instintos suicidas por la noche que ellos si aprendieron a volver y siempre con cierto nivel de experiencia.
Si crees que es coincidencia empezar a hablar de repente cuando conduces, no lo es, es solo otras de mis costumbres que se van contigo. Pero cuida bien de ella, que te puede dar las mejores ideas que hayas tenido.
A estas alturas ya no se quien soy sin ti, sin todas mis palabras que terminaban por buscarte o sin todas las canciones que de algún modo hallaban la manera de rimar con tu nombre y coincidir con tu sonrisa. Jamas encontrare unos ojos que llenen el vació que han dejado los tuyos o una voz que tenga tanto poder sobre mi piel, ni una risa que haga que la piel de mis brazos se erice, mucho menos un tacto que me provoque escalofríos. Pero nunca pretendí encontrar uno igual, pues si lo hago tal vez termine por ponerle tu apellido y buscarle todo ese desorden de letras que tu me causabas, y eso nadie mas me lo podrá ofrecer y a nadie mas se lo podría dar.
Si algún día vuelvo a crear otra versión de mi sin ti, entonces no te decepciones, pues jamas sera como la que te llevaste. Siempre fui la mejor versión de mi a tu lado...
Terminare por despedirme por ultima vez de ti, ahora definitivamente. Mi ultima recomendación es que nunca dejes que mi corazón se hiele, porque el solo estará latiendo para darte las mas bonitas palabras cuando mas las necesites, solo te pide una canción al día o un "¿cómo estas?" aunque no te interese un poquito la respuesta.
La próxima vez que me veas tal vez seras tu el que tenga que echarme de menos o el que tena que venir a despedirse.
domingo, 12 de enero de 2014
Sin final
No se como empezar a decirte... pero solo queria decir que me gustaria que fueras tu, que despues de todos los tropiezos y las escusas que no llenan, seria muy lindo que fueras tu despues de la tormenta.
Despues de todo, tu eres la persona que me conoce mejor que nadie. Y no sabes cuanto me cuesta aceptar que nadie me entiende como tu. Pero aqui me tienes dejando de lado los puntos y las cosas que jamas dije por dar vuelta en la misma esquina, pero ya no quiero caminar las mismas calles si tu no estas a mi lado o si tu risa no me hace distraerme.
Ahora que te conosco ya no quiero jugar a no pisar las lineas o taparme las ansias de tocar tu cabello, ahora quiero decirte cada secreto y que conoscas cada borde y mania extraña que he atado a mis libros.
Lejos de quererte, te amo. Pero mejor no me preguntes de eso porque yo no sabria decirte de lo que hablo y te empezare a decir que siento cosas bonitas por ti y que tal vez jamas las dejare de sentir, o tal vez si, pero no quiero.
Espero que tu sientas lo mismo, porque de no ser asi, no se que he estado haciendo todo este tiempo escribiendote canciones para algun dia cantarlas cuando llueva afuera y te abraces a mi. Si no sientes lo mismo, entonces dejame con los poemas y tal vez un dia alguien mas venga a reclamarlos, pero no sabes como me hubiera gustado que tu les pusieras tu nombre.
Jamas crei que yo podria llegar a hacer cosas bonitas, pero en realidad lo bonito de todo lo que hago es que es para ti. Tu conoces mi pasado y sabes de mis miedos y esas cosas que no digo o las que digo para protegerme, tu conoces las historias de terror pero tambien conoces los castillos y los bosques donde me he perdido y las alas que he guardado desde los 9 debajo de mi colchon.
Amor nunca habia tenido un significado tan hermoso antes de ti, y jamas me habian importado esas cosas. Crei que el amor era una leyenda cruel que decian para buscar un constante destino cobarde que huia de nosotros al parecer cuando se quedaba.
No tengo que empezar a explicarte porque no creia en el amor, tu ya sabes que toda mi vida la he dedicado a cubrir mi corazon, pero llegaste tu y derribaste las murallas y costruiste un jardin hermoso en su lugar. Si te quedas jamas volvere a necesitar los grandes muros, ni el frio, ni las armaduras pesadas.
Dentro de unos años tambien sabras que mudo de piel en el invierno y que las mañanas siempre son raras en primavera, leeras todas las cartas que nunca mande o escucharas canciones que nunca me atrevi a grabar. Conoceras los gestos extraños que hago al cocinar y si tienes suerte tambien te conozcas de memoria mis estrategias para no dormir. Te dare cada risa que me sale demasiado rara, y te contare de los 2 años que pase en el mismo lugar cuando me habian aconsejado a rendirme y que yo jamas lo hice (que bueno que no).
Resuelve todos los planes que nos tengo en el cajon y todas las tacticas que terminaban en tus labios y conmigo haciendo la mejor melodia. No pretendo que sepas ya el punto donde me debes tocar para deshacerme de mi terquedad, pero no te preocupes que tenemos varias vidas para buscarlo. Dime como debemos volar para que no nos puedan seguir el rastro, porque tengo una isla para ambos en mis cuerdas.
Olvida el calendario y el reloj de tocador, yo me encargo de destruir las alarmas y encontar un sentido a los pasos. Mis mejillas se vuelven del color de mi cabellos cada vez que tus manos juegan en mi cintura o cuando tus ojos aprisionan a mis labios, pero eso lo arreglare cuando los mios encuentren tu poesia favorita, y te juro que se me ha ido la vida en ello.
Te advierto que se me pudo escapar tu nombre, pero jamas se me escapan las ganas de construirnos el mejor atardecer, porque se que te gusta observarlo con ojos melancolicos.
Quiero deshacer tus azares y convertirme en tu mejor casualidad porque tu ya lo eres. Y mejor no te cuento de aquellos que vi en verano, mejor te los muestro, pero te advierto que son mejores en otoño.
Mucho de lo que amo se debe a ti, como aquella cancion, que debo confesarte no la conocia. Ahora seria un buen momento decirte que he dicho uno mas que tres mentiras, que en realidad no soy valiente, que no se mucho de apostar aunque ya haya apostado la vida a esto, que no me gustan las noches cuando estoy en casa sola, pero la peor mentira que te he dicho es que no te amaba.
Espero que para cuando leas esto ya no haya lugar para finales felices, y que sea asi la historia mas bonita, sin finales.
Despues de todo, tu eres la persona que me conoce mejor que nadie. Y no sabes cuanto me cuesta aceptar que nadie me entiende como tu. Pero aqui me tienes dejando de lado los puntos y las cosas que jamas dije por dar vuelta en la misma esquina, pero ya no quiero caminar las mismas calles si tu no estas a mi lado o si tu risa no me hace distraerme.
Ahora que te conosco ya no quiero jugar a no pisar las lineas o taparme las ansias de tocar tu cabello, ahora quiero decirte cada secreto y que conoscas cada borde y mania extraña que he atado a mis libros.
Lejos de quererte, te amo. Pero mejor no me preguntes de eso porque yo no sabria decirte de lo que hablo y te empezare a decir que siento cosas bonitas por ti y que tal vez jamas las dejare de sentir, o tal vez si, pero no quiero.
Espero que tu sientas lo mismo, porque de no ser asi, no se que he estado haciendo todo este tiempo escribiendote canciones para algun dia cantarlas cuando llueva afuera y te abraces a mi. Si no sientes lo mismo, entonces dejame con los poemas y tal vez un dia alguien mas venga a reclamarlos, pero no sabes como me hubiera gustado que tu les pusieras tu nombre.
Jamas crei que yo podria llegar a hacer cosas bonitas, pero en realidad lo bonito de todo lo que hago es que es para ti. Tu conoces mi pasado y sabes de mis miedos y esas cosas que no digo o las que digo para protegerme, tu conoces las historias de terror pero tambien conoces los castillos y los bosques donde me he perdido y las alas que he guardado desde los 9 debajo de mi colchon.
Amor nunca habia tenido un significado tan hermoso antes de ti, y jamas me habian importado esas cosas. Crei que el amor era una leyenda cruel que decian para buscar un constante destino cobarde que huia de nosotros al parecer cuando se quedaba.
No tengo que empezar a explicarte porque no creia en el amor, tu ya sabes que toda mi vida la he dedicado a cubrir mi corazon, pero llegaste tu y derribaste las murallas y costruiste un jardin hermoso en su lugar. Si te quedas jamas volvere a necesitar los grandes muros, ni el frio, ni las armaduras pesadas.
Dentro de unos años tambien sabras que mudo de piel en el invierno y que las mañanas siempre son raras en primavera, leeras todas las cartas que nunca mande o escucharas canciones que nunca me atrevi a grabar. Conoceras los gestos extraños que hago al cocinar y si tienes suerte tambien te conozcas de memoria mis estrategias para no dormir. Te dare cada risa que me sale demasiado rara, y te contare de los 2 años que pase en el mismo lugar cuando me habian aconsejado a rendirme y que yo jamas lo hice (que bueno que no).
Resuelve todos los planes que nos tengo en el cajon y todas las tacticas que terminaban en tus labios y conmigo haciendo la mejor melodia. No pretendo que sepas ya el punto donde me debes tocar para deshacerme de mi terquedad, pero no te preocupes que tenemos varias vidas para buscarlo. Dime como debemos volar para que no nos puedan seguir el rastro, porque tengo una isla para ambos en mis cuerdas.
Olvida el calendario y el reloj de tocador, yo me encargo de destruir las alarmas y encontar un sentido a los pasos. Mis mejillas se vuelven del color de mi cabellos cada vez que tus manos juegan en mi cintura o cuando tus ojos aprisionan a mis labios, pero eso lo arreglare cuando los mios encuentren tu poesia favorita, y te juro que se me ha ido la vida en ello.
Te advierto que se me pudo escapar tu nombre, pero jamas se me escapan las ganas de construirnos el mejor atardecer, porque se que te gusta observarlo con ojos melancolicos.
Quiero deshacer tus azares y convertirme en tu mejor casualidad porque tu ya lo eres. Y mejor no te cuento de aquellos que vi en verano, mejor te los muestro, pero te advierto que son mejores en otoño.
Mucho de lo que amo se debe a ti, como aquella cancion, que debo confesarte no la conocia. Ahora seria un buen momento decirte que he dicho uno mas que tres mentiras, que en realidad no soy valiente, que no se mucho de apostar aunque ya haya apostado la vida a esto, que no me gustan las noches cuando estoy en casa sola, pero la peor mentira que te he dicho es que no te amaba.
Espero que para cuando leas esto ya no haya lugar para finales felices, y que sea asi la historia mas bonita, sin finales.
martes, 7 de enero de 2014
Primera carta para enamorarte
Este es mi primer plan, de los muchos que tengo para nosotros.
Mi primera táctica es conseguir que estés a 10 centímetros de mi y después tomare tu mano para darte un infinito, de esos que no me atrevo a dar.
Planeo conseguir un "para siempre" en tu sofá y un "quédate" cuando bese tu mejilla.
Pero mi plan maestro empieza con eso de sacarte una lagrima, de esas que solo puede conseguir una buena risa, porque las otras ya me las conozco. Planeo hacer tu sonrisa mas amplia que el amanecer y mas brillante que el sol y terminar por convertirnos en poesía antes del atardecer para ser la melodía mas hermosa durante la noche.
Te contare mis películas favoritas y te hablare de mis libros tesoro, de esos que guardo en la mesa de noche y que no me atrevo a negarles mis insomnios, y que con gusto cargo en las ojeras junto contigo. Te describiré el gran espacio que has hecho en mi corazón para mudarte y te pediré un rincón pequeño en el tuyo para dejar las letras de mis canciones y mi guitarra, porque con tantas conversaciones a media noche ya no me caben.
Y te recitare a Benedetti y te darás cuenta que es Mucho mas grave mi amor por ti, así que Hagamos un trato y no cuentes hasta diez para empezar por decirme Te quiero, que yo me encargo de convertirnos en la revolución. Ahora puedo ver que si no estamos aun juntos en esta noche La culpa es de uno, o de los dos, en todo caso, pero Vaya uno a saber porque sonrió de esta manera cada vez que te veo y cuando pienso en ti las calles lucen mas apetecibles. Después te preguntare cómo con toda esa Táctica y Estrategia conseguiste que mi Corazón Coraza se hiciera Todo lo contrario al saber que estabas cerca. Te darás cuenta que todos los versos me recuerdan a ti.
Te contare del día en que Sabines vino a matarme pero No es que muera de amor... muero de ti, o de tu ausencia, de la nuestra. Pero Amor mio, mi amor cómo te puedo llegar a explicar estas ganas de terminar por crear nuevas constelaciones en tu espalda y sin prisas descubrir nuevos mares y planetas en el vaivén de tu pecho y el ritmo de tus manos.
Los poetas van a terminar teniendo razón, pero Déjame sueltas las manos, porque tal vez Neruda pueda salvarnos y después de estar juntos y de conseguir un contrato sin plazo para quedarme en tus rizos y besarte sin titubeos que No me pregunten acerca del tiempo perdido, porque terminare dándome de bruces contra todos los poemas que nunca te di por cobardía barata.
Ahora te pido que me des un mes para estar a tu lado, para hablarte de los lugares en los que te he buscado y de la gente que me ha preguntado de ti, porque toda mi vida te he buscado en rostros que no eran el tuyo y te he mencionado con nombres que ahora me rió al darme cuenta que no suenan igual.
Te hablare de la vez que pensé que eras el chico que cruzaba la calle y que me sonrió por casi 5 segundos, o cuando te confundí con un lindo vestido carmín y un par de piernas largas. O de aquella vez que yo llegue muy temprano y con los nervios en las manos visiblemente extraños y con ese sofocante olor a Agosto en el pelo, y una terrible sensación en las piernas de Lunes, que bien podría ser Miércoles o Jueves de cualquier otro mes, pero no lo fue porque te vi por primera vez.
Te regalare la primera versión de una bienvenida que nunca llego y de una platica que mas bien fue un intento patético por decir mi apellido.
Esta es mi estrategia para convencerte de que merezco la pena y para convencerme de que ha valido la tardanza, y en realidad espero que funcione, pero si mis planes no funcionan aun me quedan excusas y motivos para vernos. Esta es la primera carta y la entrega de la segunda solo dependerá de ti.
Mi primera táctica es conseguir que estés a 10 centímetros de mi y después tomare tu mano para darte un infinito, de esos que no me atrevo a dar.
Planeo conseguir un "para siempre" en tu sofá y un "quédate" cuando bese tu mejilla.
Pero mi plan maestro empieza con eso de sacarte una lagrima, de esas que solo puede conseguir una buena risa, porque las otras ya me las conozco. Planeo hacer tu sonrisa mas amplia que el amanecer y mas brillante que el sol y terminar por convertirnos en poesía antes del atardecer para ser la melodía mas hermosa durante la noche.
Te contare mis películas favoritas y te hablare de mis libros tesoro, de esos que guardo en la mesa de noche y que no me atrevo a negarles mis insomnios, y que con gusto cargo en las ojeras junto contigo. Te describiré el gran espacio que has hecho en mi corazón para mudarte y te pediré un rincón pequeño en el tuyo para dejar las letras de mis canciones y mi guitarra, porque con tantas conversaciones a media noche ya no me caben.
Y te recitare a Benedetti y te darás cuenta que es Mucho mas grave mi amor por ti, así que Hagamos un trato y no cuentes hasta diez para empezar por decirme Te quiero, que yo me encargo de convertirnos en la revolución. Ahora puedo ver que si no estamos aun juntos en esta noche La culpa es de uno, o de los dos, en todo caso, pero Vaya uno a saber porque sonrió de esta manera cada vez que te veo y cuando pienso en ti las calles lucen mas apetecibles. Después te preguntare cómo con toda esa Táctica y Estrategia conseguiste que mi Corazón Coraza se hiciera Todo lo contrario al saber que estabas cerca. Te darás cuenta que todos los versos me recuerdan a ti.
Te contare del día en que Sabines vino a matarme pero No es que muera de amor... muero de ti, o de tu ausencia, de la nuestra. Pero Amor mio, mi amor cómo te puedo llegar a explicar estas ganas de terminar por crear nuevas constelaciones en tu espalda y sin prisas descubrir nuevos mares y planetas en el vaivén de tu pecho y el ritmo de tus manos.
Los poetas van a terminar teniendo razón, pero Déjame sueltas las manos, porque tal vez Neruda pueda salvarnos y después de estar juntos y de conseguir un contrato sin plazo para quedarme en tus rizos y besarte sin titubeos que No me pregunten acerca del tiempo perdido, porque terminare dándome de bruces contra todos los poemas que nunca te di por cobardía barata.
Ahora te pido que me des un mes para estar a tu lado, para hablarte de los lugares en los que te he buscado y de la gente que me ha preguntado de ti, porque toda mi vida te he buscado en rostros que no eran el tuyo y te he mencionado con nombres que ahora me rió al darme cuenta que no suenan igual.
Te hablare de la vez que pensé que eras el chico que cruzaba la calle y que me sonrió por casi 5 segundos, o cuando te confundí con un lindo vestido carmín y un par de piernas largas. O de aquella vez que yo llegue muy temprano y con los nervios en las manos visiblemente extraños y con ese sofocante olor a Agosto en el pelo, y una terrible sensación en las piernas de Lunes, que bien podría ser Miércoles o Jueves de cualquier otro mes, pero no lo fue porque te vi por primera vez.
Te regalare la primera versión de una bienvenida que nunca llego y de una platica que mas bien fue un intento patético por decir mi apellido.
Esta es mi estrategia para convencerte de que merezco la pena y para convencerme de que ha valido la tardanza, y en realidad espero que funcione, pero si mis planes no funcionan aun me quedan excusas y motivos para vernos. Esta es la primera carta y la entrega de la segunda solo dependerá de ti.
domingo, 5 de enero de 2014
Soy solo mitad
Tal vez te seguira pareciendo cliche, pero yo sigo sintiendo lo mismo desde hace tiempo. He escuchado que tu aun mencionas mi nombre cuando la noche es demasiado pesada o cuando recuerdas que yo temblaba de frio en invierno cuando tomabas mi mano. Pero yo ya llevo tres inviernos sin ti y mira que he sobrevivido.
Es gracioso que aun te siga recordando, pero la verdad es que siempre he sido masoquista emocional o tal vez es que solo tengo esta discapacidad emocional que no me permite dejar de pensar en ti de cuando en cuando.
Mi problema en realidad eres tu. Mi problema es que ya no estas y me falta la mitad de mi.
El problema es que despierto solo con la mitad del cielo azul y con solo la mitad de mi corazon. Que me quede con todos los puntos finales y me faltan todas las mayusculas para empezar tu nombre, porque tambien la palabra amor se fue contigo.
No sabes cuanto te echan de menos mis paginas y mis repisas, y todos mis dibujos que extrañan tener tus ojos y tu sonrisa de madrugada.
Apuesto a que has escuchado de aquella vez que intente ir a tu casa, pero me acobarde en el ultimo momento y decidi dar la vuelta con las lagrimas cociendo mi risa nerviosa. Seguro te han contado que cuando intente escribirte la verdad termine escribiendo otro poema sobre ti en mi diario y que jamas te llego.
Quizas lo unico que quiero decirte es que estoy perdida sin ti y que la verdad es que me extraño un poco mas a mi. Que me gustaria tambien haberme podido quedar con la mitad de ti, pero que esa siempre fue tuya.
Desde siempre me ha gustado la manera en la que eres tan tuyo, en la que no necesitas nada ni a nadie (incluso cuando queria que me necesitaras). He amado tu libertad y la forma en la que tus alas se alejan tanto como me gustaba ver el atardecer a tu lado. Siempre supe que nunca te quedarias y por eso te amaba mas, porque era como presenciar un eclipse o una lluvia de estrellas, y yo solo deseaba que eso jamas terminara, pero como todas las cosas hermosas, termino.
No pretendo que te quedes conmigo y dejes los aviones y los trenes que te esperan, porque ellos tambien te extrañaran, pero no te das una idea de lo mucho que me hubiera gustado.
Lo que mas duele es que ahora solo soy la mitad de castaña que era y que mis mejillas son la mitad de palidas que de costumbre y que mis tardes duran siempre la mitad del dia y no el dia entero como eran contigo. Que ya no hay eternidades en horas contadas, ni infinitos en un abrazo de despidida. Que ya no me importan los autos que pasan o los pasos que dure una charla, porque ahora solo tengo la mitad de la conversacion y no se como terminarla. Que aqui solo cae la mitad de la lluvia y me deja siempre una media sequia que resquebraja mi corazon un poquito mas, pero ese pronto desaparecera.
Que tal vez lo mas dificil de decir no es que tengo la mitad de mi corazon sin ti, sino que te amo completamente con la mitad que soy.
Es gracioso que aun te siga recordando, pero la verdad es que siempre he sido masoquista emocional o tal vez es que solo tengo esta discapacidad emocional que no me permite dejar de pensar en ti de cuando en cuando.
Mi problema en realidad eres tu. Mi problema es que ya no estas y me falta la mitad de mi.
El problema es que despierto solo con la mitad del cielo azul y con solo la mitad de mi corazon. Que me quede con todos los puntos finales y me faltan todas las mayusculas para empezar tu nombre, porque tambien la palabra amor se fue contigo.
No sabes cuanto te echan de menos mis paginas y mis repisas, y todos mis dibujos que extrañan tener tus ojos y tu sonrisa de madrugada.
Apuesto a que has escuchado de aquella vez que intente ir a tu casa, pero me acobarde en el ultimo momento y decidi dar la vuelta con las lagrimas cociendo mi risa nerviosa. Seguro te han contado que cuando intente escribirte la verdad termine escribiendo otro poema sobre ti en mi diario y que jamas te llego.
Quizas lo unico que quiero decirte es que estoy perdida sin ti y que la verdad es que me extraño un poco mas a mi. Que me gustaria tambien haberme podido quedar con la mitad de ti, pero que esa siempre fue tuya.
Desde siempre me ha gustado la manera en la que eres tan tuyo, en la que no necesitas nada ni a nadie (incluso cuando queria que me necesitaras). He amado tu libertad y la forma en la que tus alas se alejan tanto como me gustaba ver el atardecer a tu lado. Siempre supe que nunca te quedarias y por eso te amaba mas, porque era como presenciar un eclipse o una lluvia de estrellas, y yo solo deseaba que eso jamas terminara, pero como todas las cosas hermosas, termino.
No pretendo que te quedes conmigo y dejes los aviones y los trenes que te esperan, porque ellos tambien te extrañaran, pero no te das una idea de lo mucho que me hubiera gustado.
Lo que mas duele es que ahora solo soy la mitad de castaña que era y que mis mejillas son la mitad de palidas que de costumbre y que mis tardes duran siempre la mitad del dia y no el dia entero como eran contigo. Que ya no hay eternidades en horas contadas, ni infinitos en un abrazo de despidida. Que ya no me importan los autos que pasan o los pasos que dure una charla, porque ahora solo tengo la mitad de la conversacion y no se como terminarla. Que aqui solo cae la mitad de la lluvia y me deja siempre una media sequia que resquebraja mi corazon un poquito mas, pero ese pronto desaparecera.
Que tal vez lo mas dificil de decir no es que tengo la mitad de mi corazon sin ti, sino que te amo completamente con la mitad que soy.
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