¿De qué sirve tener la razón
si ya no tengo lo que quiero,
si ya no tengo a quien quiero?
Ojalá el tiempo
no me hubiese concedido la razón.
Ojalá me hubiese equivocado
una,
y otra,
y otra vez.
Las mentiras son como las pintan
preciosas,
pero se pudren rápido.
Tú no eres todo lo que te crees
y yo soy más de lo que parezco.
Te jodes.
Antes de ser un capullo
sal de él,
antes de hablar mierda de la gente
límpiate la boca.
Yo sí tengo cara de darla.
¿La tendrás tú de sostenerla?
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